Autor: Antonio García-Crews.
La última gran reforma a la Ley de Inmigración de los Estados Unidos se hizo en 1986, conocida bajo las siglas IRCA, la cual permitió a millones de inmigrantes indocumentados empezar un proceso para legalizarse. Después de IRCA se hicieron dos grandes intentos: uno durante la Presidencia de George W. Bush, y otro en la de Barack Obama, pero ambos fracasaron en el Congreso.
En Junio 15, 2012 –como alivio temporal a los jóvenes que son los más afectados – el Presidente Barak Obama implementó la Acción Ejecutiva conocida como DACA (Acción Diferida para los que menores de edad traídos por sus padres antes de 2007). La Acción Ejecutiva no es ley, y por lo tanto, al cambiar la Administración, el Ejecutivo entrante pudo eliminarla.
En Junio 27, 2013, el Senado aprobó por una mayoría de 68 votos el Proyecto Bipartidista de Ley #5744 que proponía una Reforma Inmigratoria Integral. Durante el resto de 2013 y el 2014, el entonces líder de la mayoría Republicana en la Cámara de Representantes se negó a someter a votación la proposición aprobada por el Senado. Después de este fracaso, no ha habido intento serio alguno para una Reforma Inmigratoria Integral.
Como consecuencia de la parálisis en la Cámara de Representantes, en Noviembre 20, 2014, el Presidente Obama emitió la Acciones Ejecutivas conocidas como: (a) DACA2 ampliando substancialmente los que calificaban para DACA1, y (b) DAPA para proteger a los padres de los DACA, permi-tiéndoles permanecer en los Estados Unidos con un Permiso de Empleo temporal.
Después de un complicado proceso legal, la Corte Suprema de los Estados Unidos desestimó ambas acciones ejecutivas. Solamente se mantiene vigente el DACA1 que, por Orden Ejecutiva del Presidente Donald Trump, quedará eliminado en Marzo 5, 2018 si el Congreso no llega a un acuerdo sobre su continuación. Esto ha creado zozobra y protestas a lo largo del país. Al momento de escribir este artículo, el Congreso se prepara a discutir la cuestión.
Breve descripción de DACA1:
Beneficia a los menores que entraron ilegalmente con sus padres a los Estados Unidos antes de cumplir los 16 años – antes de Junio 15, 2007. Tienen que ser estudiantes o, al menos haber terminado el High School. Se les otorga un permiso de trabajo renovable, lo cual les permite conseguir un número de Seguridad Social y una licencia para manejar. Y lo mas importante: les permite continuar sus estudios universitarios. Actualmente se calcula que hay alrededor de 800,000 jóvenes protegidos por DACA y cerca de 11 millones fuera de estatus (indocumentados) en Estados Unidos.
Antecedentes e Importancia:
El 13 de Marzo, 2013, fue elegido el Cardenal argentino Jorge Bergolio como Sumo Pontifice y adoptó el nombre de Francisco. El Papa Francisco fue ordenado sacerdote en 1969 – es pues el primer pontífice ordenado posteriormente al Vaticano II. Sin embargo -de acuerdo a Massimo Faggioli, teólogo y profesor de Villanova University en Pennsylvania- para Francisco el Vaticano II es clave en sus actividades y documentos: La Alegría del Evangelio (noviembre 2013) y Laudato Si (mayo 2015) etc. En su primer viaje fuera de Roma (julio 8, 2013), Francisco visitó Lampedusa, un puerto al sur de Italia que es centro de refugiados africanos a través del Mediterráneo. En aquella ocasión se hizo famosa su frase: “La globalización de la indiferencia nos hace a todos carentes de nombres y rostros, pero sin embargo responsables – Adán , dónde estás? y Dónde está tu hermano?. Estas son dos preguntas que Dios nos hace desde el comienzo de la historia, y nos las hace hoy a nosotros también”. Y Francisco nos hace una tercera pregunta: “Alguno de nosotros ha llorado por refugiados o inmigrantes como estos?
En junio de 2015, un nuevo candidato a la nominación republicada comenzó su campaña acusando a los inmigrantes mexicanos de asesinos y depredadores sexuales. Nunca antes en Estados Unidos un candidato a un importante puesto público tan importante había expresado esas falsas acusaciones. Esto lo digo tomando plena responsabilidad pues a mi práctica me han acudido más de mil casos de mexicanos y me he percatado que son trabajadores y tienen valores familiares y religiosos, además de ser extremadamente necesarios en varias áreas de nuestra economía. También desde su campaña, el candidato –ahora presidente – ha promovido la construcción de un muro en la frontera que supuestamente Mexico pagaría.
En Febrero 17, 2016, en Ciudad Juarez, Mexico, a pocos metros de la frontera con Estados Unidos, desde el altar bajo la cruz, el Papa Francisco pronunció su homilía, y dijo: “Aquí en Ciudad Juarez y en otras áreas de la frontera donde miles de migrantes de Mexico y América Central pasan al otro lado, cada paso del camino contiene graves injusticias, los esclavizados, los presos y los extorsionados, tantos hermanos y hermanas son víctimas del tráfico humano”. Pocas horas después, en el avión de regreso, el Papa comentó en rueda de prensa que los que levantan muros entre seres humanos no son Cristianos.
En Septiembre 2017, a su regreso de Colombia, el Papa explicó que “los que se oponen al DACA no son Pro-vida”. En los Estados Unidos tiende a haber una gran confusión en lo que es ser Pro-vida. Muchos lo reducen a manifestarse contra el aborto e ignoran muchos otros aspectos de la defensa de la vida, como son: el control de las armas de fuego, la eliminación de la pena de muerte, la concentración de la riqueza en manos de unos pocos, la defensa del vulnerable incluyendo los jóvenes “Dreamers”, y otros aspectos incluídos en la Doctrina Social de la Iglesia. En Estados Unidos, la iglesia Católica es ejemplar en la protección al inmigrante a todos los niveles.
En resumen, continuar los beneficios de DACA a favor de los jóvenes es lo más urgente, pero no lo único. Es la cima de un témpano de hielo. Las entradas ilegales en los Estados Unidos han declinado dramáticamente, pero aún se pretende crear divisiones y miedo con argumentos como el de que los indocumentados son de alguna forma criminales. Sin embargo, individuos como el franco-tirador de Las Vegas, asesino de 50 personas a sangre fría era un nativo de los Estados Unidos, y así casi todos los que han cometido masacres similares. No es justo acusar a los recién llegados de los males que existen en nuestra sociedad. Sin embargo, históricamente ha sido así.
Considero pues que es un deber de Cristiano ayudar al necesitado. Eso no impide cumplir con las leyes de los Estados Unidos.
En el juicio final, Cristo nos dirá: “Fui extranjero y me recibiste”.